En todo este tiempo siempre he dicho que Quilla es mi polo a tierra y vuelvo y lo digo, es un lugar en el cual descargo todo lo negativo y me alimento de cosas positivas, a Quilla se le esta sumando Cartagena lugar donde la paso bacanisimo. Bueno por estos días hay cosas que me están dando muchas vueltas en la cabeza, decisiones que tomar riegos a enfrentar cosas por el estilo, me gusta eso, siempre me han gustado los retos y creo que mediré a uno nuevo (espero ser vencedor), no le tengo miedo pero si mucho respeto y creo que a esta altura del partido es justo y necesario, en verdad es justo y necesario.
Foto por Algonca
Dos palabra, mejor dos frases “es realidad” o “de mentiras”, opto por la primera, la realidad compuestas por fragmentos de la vida, escrita con sangre y bañada en sudor, esa es ella. Por eso muchos le temen pero es muy necesaria.
Se que es verdad, que es realidad y solo hay que seguir el rumbo natural de las cosas, mirar al cielo y que el viento sea un compañero fiel y en la noche las estrellas excelentes guías, pero puedo perderme como un marinero encanto por una sirena, cerrar mis ojos y que mi barco tomara el rumbo que ella marcara, o decidir lo contrario, pasar a su lado sin distinguir, cerrar mis oídos y abrir bien mis ojos tomando mi propia ruta, hace muchas lunas navego solo en alta-mar fijando mi destino pero este barco es inmenso y agotador y no seria nada mal que alguien mas fijara un destino
“Amar es extrañar a la ultima persona con la que estuvimos y si estamos con ella es recordarla solamente,…el amor no es para siempre y siempre llegara a nuestra vida alguien a quien extrañar o recordar.”
Palabras después de filosofar un rato llegamos a esta conclusión, jajajaja,
Post: palabras de despechados,…:)
La soledad que lo acompañaba
Era el karma de su existencia
La cual se confundió
Con la tristeza eterna de perderla
Y comprender que el rumbo que llevaba
Había desaparecido
Entendió que sin ella no existía un camino
Un ente más de aquella urbe se había convertido
No valían las palabras solo su soledad era su fiel consejera, su voz se desvanecía, su presencia se extinguió, poco a poco dejo de ser, poco a poco dejo de estar, paso a ser un recuerdo, paso a ser un olvido, pero desde la eternidad de su alma miraba fijamente aquella ventana esperando el día en que aquel ser dejara de serlo y por fin abandonar el karma de su existencia.